Dipakadi

Dipakadi
"Ser catequista es.... Ser un instrumento para que Dios te hable por medio de su palabra en la Sagrada Escritura"

sábado, 22 de septiembre de 2012


II Encuentro Nacional de Catequistas 2012

Tema 4.  La catequesis, acción prioritaria en la misión evangelizadora de la iglesia


Objetivo:
Comprender el significado de la catequesis, para valorar su importancia en la misión evangelizadora de la Iglesia.

MIRA TU REALIDAD
 ¿Qué es para mí la catequesis?
La catequesis:
  1. Es enseñar y aprender las verdades de fe.
  2. Es la preparación para recibir los sacramentos.
  3. Es un ministerio profético de la Iglesia.
  4. Es formar hombres comprometidos con Cristo capaces de comunión y participación.
  5. Es un proceso de formación en la fe que lleva a la persona, de un encuentro con Jesucristo vivo, a una profundización de la misma, mediante un proceso de constante conversión y hacia el compromiso social.
  6. Es parte fundamental del proceso evangelizar de una persona, mediante la cual se va adhiriendo sistemática y gradualmente a Jesucristo.
  7. Es la formación cristiana de  los niños.
  8. Es una tarea que se hace cuando se puede.
  9. Es una acción que corresponde únicamente al catequista.
Es enseñar y aprender las verdades de fe.

299. La catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los demás. Para ello, resultarían útiles algunos subsidios catequéticos elaborados a partir del Catecismo de la Iglesia Católica y del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, estableciendo cursos y escuelas de formación permanente para catequistas.

Documento de Aparecida

Es la preparación para recibir los sacramentos.

20. La finalidad específica de la catequesis no consiste únicamente en desarrollar, con la ayuda de Dios, una fe aún inicial, en promover en plenitud y alimentar diariamente la vida cristiana de los fieles de todas las edades. Se trata en efecto de hacer crecer, a nivel de conocimiento y de vida, el germen de la fe sembrado por el Espíritu Santo con el primer anuncio y transmitido eficazmente a través del bautismo.
La catequesis tiende pues a desarrollar la inteligencia del misterio de Cristo a la luz de la Palabra, para que el hombre entero sea impregnado por ella. Transformado por la acción de la gracia en nueva criatura, el cristiano se pone así a seguir a Cristo y, en la Iglesia, aprende siempre a pensar mejor como Él, a juzgar como Él, a actuar de acuerdo con sus mandamientos, a esperar como Él nos invita a ello…

Es formar hombres comprometidos con Cristo capaces de comunión y participación.

992. La obra evangelizadora que se realiza en la catequesis exige la comunión de todos: pide ausencia de divisiones y que las personas se encuentren en una fe adulta y en un amor evangélico. Una de las metas de la catequesis es precisamente la construcción de la comunidad.

Documento de Puebla

Es un proceso de formación en la fe que lleva a la persona, de un encuentro con Jesucristo vivo, a una profundización de la misma, mediante un proceso de constante conversión y hacia el compromiso social.

278. En el proceso de formación de discípulos misioneros destacamos cinco aspectos fundamentales que aparecen de diversa manera en cada etapa del camino, pero que se compenetran íntimamente y se alimentan entre sí:

a)        El Encuentro con Jesucristo. Quienes serán sus discípulos ya lo buscan (cf. Jn 1, 38), pero es el Señor quien los llama: Sígueme (Mc 1, 14; Mt 9, 9). Este encuentro debe renovarse constantemente por el testimonio personal, el anuncio del kerygma y la acción misionera de la comunidad…
b)        La Conversión: Es la respuesta inicial de quien ha escuchado al Señor con admiración, cree en Él por la acción del Espíritu, se decide a ser su amigo e ir tras de Él, cambiando su forma de pensar y de vivir, aceptando la cruz de Cristo…
c)        El Discipulado: La persona madura constantemente en el conocimiento, amor y seguimiento de Jesús maestro, profundiza en el misterio de su persona, de su ejemplo y de su doctrina…
d)        La Comunión: No puede haber vida cristiana sino en comunidad: en las familias, las parroquias, las comunidades de vida consagrada, las comunidades de base, otras pequeñas comunidades y movimientos…
e)     La Misión: El discípulo, a medida que conoce y ama a su Señor, experimenta la necesidad de compartir con otros su alegría de ser enviado, de ir al mundo a anunciar a Jesucristo, muerto y resucitado, a hacer realidad el amor y el servicio en la persona de los más necesitados, en una palabra, a construir el Reino de Dios…      
Documento de Aparecida

Es parte fundamental del proceso evangelizar de una persona, mediante la cual se va adhiriendo sistemática y gradualmente a Jesucristo.

984. —Una cada vez mayor toma de conciencia de que la catequesis es un proceso dinámico, gradual y permanente de educación en la fe.
998. La catequesis debe llevar a un proceso de conversión y crecimiento permanente y progresivo en la fe.

Documento de Puebla

Es la formación cristiana de  los niños.

35. El tema señalado por mi Predecesor, Pablo VI, para la IV Asamblea general del Sínodo de los Obispos versaba sobre «la catequesis en nuestro tiempo con especial atención a los niños y a los jóvenes»…

Párvulos
36. Un momento con frecuencia destacado es aquel en que el niño pequeño recibe de sus padres y del ambiente familiar los primeros rudimentos de la catequesis, que acaso no serán sino una sencilla revelación del Padre celeste, bueno y providente, al cual aprende a dirigir su corazón…

Niños
37. Pronto llegará, en la escuela y en la iglesia, en la parroquia o en la asistencia espiritual recibida en el colegio católico o en el instituto estatal, a la vez que la apertura a un círculo social más amplio, el momento de una catequesis destinada a introducir al niño de manera orgánica en la vida de la Iglesia…

Adolescentes
38. Luego vienen la pubertad y la adolescencia, con las grandezas y los riesgos que presenta esa edad. Es el momento del descubrimiento de sí mismo y del propio mundo interior, el momento de los proyectos generosos, momento en que brota el sentimiento del amor, así como los impulsos biológicos de la sexualidad, del deseo de estar juntos; momento de una alegría particularmente intensa, relacionada con el embriagador descubrimiento de la vida…

Jóvenes
39. Con la edad de la juventud llega la hora de las primeras decisiones. Ayudado tal vez por los miembros de su familia y por los amigos, mas a pesar de todo solo consigo mismo y con su conciencia moral, el joven, cada vez más a menudo y de modo más determinante, deberá asumir su destino

Minusválidos
41. Se trata ante todo de los niños y de los jóvenes física o mentalmente minusválidos. Estos tienen derecho a conocer como los demás coetáneos el «misterio de la fe»…
Jóvenes sin apoyo religioso
42. Mi pensamiento se dirige después a los niños y a los jóvenes, cada vez más numerosos, nacidos y educados en un hogar no cristiano, o al menos no practicante, pero deseosos de conocer la fe cristiana…

Adultos
43. Continuando la serie de destinatarios de la catequesis, no puedo menos de poner de relieve ahora una de las preocupaciones más constantes de los Padres del Sínodo, impuesta con vigor y con urgencia por las experiencias que se están dando en el mundo entero: se trata del problema central de la catequesis de los adultos…

Cuasi catecúmenos
44. Entre estos adultos que tienen necesidad de la catequesis, nuestra preocupación pastoral y misionera se dirige a los que, nacidos y educados en regiones todavía no cristianizadas, no han podido profundizar la doctrina cristiana que un día las circunstancias de la vida les hicieron encontrar…con el embriagador descubrimiento de la vida…

CT
Es una tarea que se hace cuando se puede.

La evangelización, vocación propia de la Iglesia

14. La Iglesia lo sabe. Ella tiene viva conciencia de que las palabras del Salvador: "Es preciso que anuncie también el reino de Dios en otras ciudades", se aplican con toda verdad a ella misma. Y por su parte ella añade de buen grado, siguiendo a San Pablo: "Porque, si evangelizo, no es para mí motivo de gloria, sino que se me impone como necesidad. ¡Ay de mí, si no evangelizara!". Con gran gozo y consuelo hemos escuchado Nos, al final de la Asamblea de octubre de 1974, estas palabras luminosas: "Nosotros queremos confirmar una vez más que la tarea de la evangelización de todos los hombres constituye la misión esencial de la Iglesia"; una tarea y misión que los cambios amplios y profundos de la sociedad actual hacen cada vez más urgentes. Evangelizar constituye, en efecto, la dicha y vocación propia de la Iglesia, su identidad más profunda. Ella existe para evangelizar, es decir, para predicar y enseñar, ser canal del don de la gracia, reconciliar a los pecadores con Dios, perpetuar el sacrificio de Cristo en la santa Misa, memorial de su muerte y resurrección gloriosa.

Evangelii Nuntiandi

Del salmo 82, 2-4

¿Hasta cuándo juzgarán injustamente y favorecerán a los malvados? ¡Defiendan al desvalido y al huérfano, hagan justicia al oprimido y al pobre; libre al débil y al indigente rescátenlos del poder de los opresores! palabra de Dios.
R: Te alabamos, Señor.

Solo le pido a Dios que el dolor no me sea indiferente, que la reseca muerte no me encuentre, vacío y solo sin haber hecho lo suficiente.
Sólo le pido a Dios que lo injusto no me sea indiferente, que no  me abofeteen la otra mejilla, después de que un garra me araño esta suerte.
Sólo le pido a Dios que la guerra no me sea indiferente, es un monstruo grande y pisa fuerte, toda la pobre inocencia de la gente. 
Sólo le pido a Dios que el engaño no me sea indiferente, si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden fácilmente.
Sólo le pido a Dios que el futuro no me sea indiferente desahuciado está el que tiene que marchar a vivir una cultura   diferente.

II Encuentro Nacional de Catequistas 2012

Tema 3. Comprometidos en la iglesia, pueblo de dios, construimos su reino.



Objetivo:
Profundizar nuestra identidad eclesial, tomando conciencia de la comunión y participación, para proyectar una iglesia viva como discípulo misionero de Cristo.

Mira tu realidad:
¿Qué es para mí la Iglesia?
¿Cuál es el modelo de Iglesia que percibo en mi ambiente?
n  Una Iglesia tradicionalista: centrada en fiestas patronales, procesiones, eventos…
n  Una Iglesia piramidal: lo que dice la autoridad es palabra inspirada.
n  Iglesia sacramental: las personas se acercan a la parroquia para buscar sacramentos, sacramentales, bendiciones…
n  Comunión y participación: en la que hay una relación fraterna de apertura y diálogo con las personas.
n  Servidora: para transformar la vida comunitaria, en un ambiente de promoción humana, solidaridad y vida de la caridad.
n  Una Iglesia al servicio del reino: donde se busca la unidad entre las diversas áreas de la pastoral, que la comunidad necesita, para tener un Encuentro con Jesucristo, desde el anuncio de la Palabra, la celebración, la fraternidad y el servicio de la caridad.
n  Una Iglesia carismática y ministerial: donde los dones de cada uno se ponen el servicio de los demás.
¿Cómo vivo el sentido de Iglesia en mi parroquia?
n  La relación con los diversos grupos.
n  Los laicos toman parte en las decisiones para el servicio de la comunidad.
n  La  relación y comunicación que existe entre los laicos y sacerdotes.
n  La integración de tu parroquia al plan diocesano y la comunión que se guarda con el Obispo.
¿Cómo vivo el sentido de Iglesia en mi parroquia?

Ilumina tu realidad
En grupos se pueden distribuir los textos de los siguientes documentos:

Jn 17: la Iglesia está llamada a vivir la unidad.
1. Estas cosas habló Jesús, y alzando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que el Hijo te glorifique a ti, 2 por cuanto le diste autoridad sobre todo ser humano para que dé vida eterna a todos los que tú le has dado…
… yo les he dado las palabras que me diste; y las recibieron, y entendieron que en verdad salí de ti, y creyeron que tú me enviaste. 9 Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me has dado; porque son tuyos; 10 y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo, mío; y he sido glorificado en ellos. 
… No te ruego que los saques del mundo, sino que los guardes del maligno. 16 Ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. 17 Santifícalos en la verdad; tu palabra es verdad. 18 Como tú me enviaste al mundo, yo también los he enviado al mundo. 19 Y por ellos yo me santifico, para que ellos también sean santificados en la verdad. 20 Mas no ruego sólo por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, 21 para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste

Lumen Gentium 1. La Iglesia como Sacramento de Cristo, imagen de él en el mundo.
1. Por ser Cristo luz de las gentes, este sagrado Concilio, reunido bajo la inspiración del Espíritu Santo, desea vehementemente iluminar a todos los hombres con su claridad, que resplandece sobre el haz de la Iglesia, anunciando el Evangelio a toda criatura (cf. Mc., 16,15).
Y como la Iglesia es en Cristo como un sacramento o señal e instrumento de la íntima unión con Dios y de la unidad de todo el género humano, insistiendo en el ejemplo de los Concilios anteriores, se propone declarar con toda precisión a sus fieles y a todo el mundo su naturaleza y su misión universal.
Las condiciones de estos tiempos añaden a este deber de la Iglesia una mayor urgencia, para que todos los hombres, unidos hoy más íntimamente con toda clase de relaciones sociales, técnicas y culturales, consigan también la plena unidad en Cristo.

Lumen Gentium 5. El Reino de Dios
5. El misterio de la santa Iglesia se manifiesta en su fundación. Pues nuestro Señor Jesús dio comienzo a su Iglesia predicando la buena nueva, es decir, el Reino de Dios, prometido muchos siglos antes en las Escrituras: "Porque el tiempo está cumplido, y se acercó el Reino de Dios" (Mc., 1,15; cf. Mt., 4,17).
Ahora bien, este Reino comienza a manifestarse como una luz delante de los hombres, por la palabra, por las obras y por la presencia de Cristo. La palabra de Dios se compara a una semilla, depositada en el campo (Mc., 4,14): quienes la reciben con fidelidad y se unen a la pequeña grey (Lc., 12,32) de Cristo, recibieron el Reino; la semilla va germinando poco a poco por su vigor interno, y va creciendo hasta el tiempo de la siega (cf. Mc., 4,26-29).
Los milagros, por su parte, prueban que el Reino de Jesús ya vino sobre la tierra: "Si expulso los demonios por el dedo de Dios, sin duda que el Reino de Dios ha llegado a vosotros" (LC., 11,20; cf. Mt., 12,28). Pero, sobre todo, el Reino se manifiesta en la Persona del mismo Cristo, Hijo del Hombre, que vino "a servir, y a dar su vida para redención de muchos" (Mc., 10,45).
Pero habiendo resucitado Jesús, después de morir en la cruz por los hombres, apareció constituido para siempre como Señor, como Cristo y como Sacerdote (cf. Act., 2,36; Hebr., 5,6; 7,17-21), y derramó en sus discípulos el Espíritu prometido por el Padre (cf. Act., 2,33).
Por eso la Iglesia, enriquecida con los dones de su Fundador, observando fielmente sus preceptos de caridad, de humildad y de abnegación, recibe la misión de anunciar el Reino de Cristo y de Dios, de establecerlo en medio de todas las gentes, y constituye en la tierra el germen y el principio de este Reino. Ella en tanto, mientras va creciendo poco a poco, anhela el Reino consumado, espera con todas sus fuerzas,y desea ardientemente unirse con su Rey en la gloria.

Lumen Gentium 6. Las varias figuras de la Iglesia
La Iglesia es, pues, un "redil", cuya única y obligada puerta es Cristo (Jn., 10,1-10). Es también una grey, cuyo Pastor será el mismo Dios, según las profecías (cf. Is., 40,11; Ez., 34,11ss), y cuyas ovejas aunque aparezcan conducidas por pastores humanos, son guiadas y nutridas constantemente por el mismo Cristo, buen Pastor, y jefe rabadán de pastores (cf. Jn., 10,11; 1 Pe., 5,4), que dio su vida por las ovejas (cf. Jn., 10,11-16).
La Iglesia es "agricultura" o labranza de Dios (1 Cor., 3,9). En este campo crece el vetusto olivo, cuya santa raíz fueron los patriarca,s en la cual se efectuó y concluirá la reconciliación de los judíos y de los gentiles (Rom., 11,13-26). El celestial Agricultor la plantó como viña elegida (Mt., 21,33-43; cf. Is., 5,1ss).
La verdadera vid es Cristo, que comunica la savia y la fecundidad a los sarmientos, es decir, a nosotros, que estamos vinculados a El por medio de la Iglesia y sin El nada podemos hacer (Jn., 15,1-5).
Muchas veces también la Iglesia se llama "edificación" de Dios (1 Cor., 3,9). El mismo Señor se comparó a la piedra rechazada por los constructores, pero que fue puesta como piedra angular (Mt., 21,42; cf. Act., 4,11; 1 Pe., 2,7; Sal., 177,22).
Sobre aquel fundamento levantan los apóstoles la Iglesia (cf. 1 Cor., 3,11) y de él recibe firmeza y cohesión. A esta edificación se le dan diversos nombres: casa de Dios (1 Tim., 3,15), en que habita su "familia", habitación de Dios en el Espíritu (Ef., 2,19-22), tienda de Dios con los hombres (Ap., 21,3) y, sobre todo, "templo" santo, que los Santos Padres celebran representado en los santuarios de piedra,y en la liturgia se compara justamente a la ciudad santa, la nueva Jerusalén. Porque en ella somos ordenados en la tierra como piedras vivas (1 Pe., 2,5). San Juan, en la renovación del mundo contempla esta ciudad bajando del cielo, del lado de Dios ataviada como una esposa que se engalana para su esposo (Ap., 21,1ss).
La Iglesia, que es llamada también "la Jerusalén de arriba" y madre nuestra (Gal., 4,26; cf. Ap., 12,17), se representa como la inmaculada "esposa" del Cordero inmaculado (Ap., 19,1; 21,2.9; 22,17), a la que Cristo "amó y se entregó por ella, para santificarla" (Ef., 5,26), la unió consigo con alianza indisoluble y sin cesar la "alimenta y abriga" (cf. Ef., 5,24), a la que, por fin, enriqueció para siempre con tesoros celestiales, para que podamos comprender la caridad de Dios y de Cristo para con nosotros que supera toda ciencia (cf. Ef., 3,19).
Pero mientras la Iglesia peregrina en esta tierra lejos del Señor (cf. 2 Cor., 5,6), se considera como desterrada, de forma que busca y piensa las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios, donde la vida de la Iglesia está escondida con Cristo en Dios hasta que se manifieste gloriosa con su Esposo (cf. Col., 3,1-4). Las varias figuras de la Iglesia

Documento de Aparecida 365 -372.
Conversión pastoral y renovación misionera de las comunidades.
n  Esta firme decisión misionera de promoción de la cultura de la vida debe impregnar todas las estructuras eclesiales y todos los planes pastorales, en todos los niveles eclesiales, así como toda institución eclesial, abandonando  las estructuras caducas  (365).
n  Los obispos, presbíteros, diáconos permanentes, consagrados y consagradas, laicos y laicas, estamos llamados a asumir una actitud de permanente conversión pastoral (366).
n  La pastoral no puede prescindir del contexto histórico en el que viven sus miembros, dado que su vida se realiza en contextos socioculturales bien concretos. Ante estas transformaciones sociales y culturales, es necesaria una renovación eclesial que implique reformas espirituales, pastorales y también instituciones (367).
n  La conversión pastoral requiere que las comunidades eclesiales sean comunidades de discípulos misioneros (368).
n  La conversión pastoral de nuestras comunidades exige que se pase de una pastoral de mera conservación a una pastoral decididamente misionera (370).
n  El proyecto pastoral de la diócesis, camino de pastoral orgánica, debe ser una respuesta consciente y eficaz para atender las exigencias del mundo de hoy con indicaciones programáticas concretas, objetivos y métodos de trabajo. Los laicos deben participar en el discernimiento, en la toma de decisiones y en la planificación y la ejecución (371).
n  Teniendo en cuenta las decisiones de nuestras parroquias, es aconsejable la sectorización de las mismas en unidades territoriales más pequeñas, con equipos propios de animación y coordinación que permitan una mayor proximidad a las personas y grupos que viven en el territorio. Es recomendable que los agentes misioneros promuevan la creación de comunidades de familias que fomenten la puesta en común de su fe y las respuestas a sus problemas. A eso puede contribuir el vocabulario misionero (372).

¿Cómo te gustaría que fuera tu parroquia de acuerdo con estos documentos? (el ideal que tienes).

Transforma tu realidad

Elaboremos un paradigma (MODELO) para nuestra Iglesia, teniendo en cuenta lo que hemos reflexionado y el sueño que tenemos. El paradigma se elabora partiendo de lo que tenemos, para pasar a los que queremos.
Ejemplo de paradigma:
De una catequesis que sólo propone verdades y doctrinas…
… a una catequesis que partiendo de la Palabra de Dios descubre y dialoga desde un lenguaje inculturado los significados profundos en la vida de los discípulos de Jesús
Vamos a hacer uno por equipo y después en plenario sacaremos uno solo como propuesta de nuestra parroquia para nuestra Iglesia.
De una Iglesia que…a      una Iglesia que…
Al final nos comprometemos:
        ¿Qué actitudes quiero asumir para alcanzar el nuevo paradigma?
        Como comunidad de catequistas, ¿qué acciones realizaremos para llevarlo a la práctica?

II Encuentro Nacional de Catequistas 2012

Tema 2.  TODA PERSONA HUMANA ES LA GRAN MARAVILLA DE DIOS



Objetivo:
Redescubrir el valor y dignidad de la persona humana, para convertirnos en promotores y defensores de su dignidad.

Mira tu realidad
¿Cuál es tu nombre?
¿Cuál es tu pasatiempo favorito?
¿Qué lugar ocupas en tu familia?
¿Qué te hace feliz?
¿Qué cualidad te caracteriza?
¿Qué se piensa sobre?
·         Tú mismo
·         La sociedad
·         Los medios de comunicación
·         El mundo laboral
·         La familia
·         La iglesia

Ilumina tu realidad
Leer y reflexionar en equipos distribuyendo los documentos siguientes para responder estas preguntas:
¿Qué nos dice el documento en relación con la persona humana?
¿Qué aspectos significativos descubres?
¿Cómo sería para ti una persona plena, feliz y realizada?
Gen 1, 26-31
Salmo 8
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, nn. 108; 130. 132.
Documento de Puebla, nn. 324- 325
Documento de Aparecida, nn. 387-390
Gaudium Spen, n. 4

Reino de Dios y promoción de la dignidad humana.
La Buena Nueva de la vida tiene un destino universal. Su mandato de amor abraza a la persona entera y a todas las personas, ambientes y pueblos (380).

Reino de Dios, justicia social y caridad cristiana.
La promoción de la vida plena de Cristo nos lleva a sumir evangélicamente y desde la perspectiva del Reino las tareas prioritarias que contribuyen a la dignificación de todo ser humano, y a trabajar junto con los demás ciudadanos e instituciones. Necesidades urgentes nos conducen a colaborar con otros organismos o instituciones para organizar estructuras más justas en los ámbitos nacionales e internacionales. Es urgente crear estructuras que consoliden un orden social, económico u político en le que no haya inequidad y donde haya posibilidades para todos (384). También es tarea de la Iglesia ayudar con la predicación, la catequesis, la denuncia, el testimonio de amor y de justicia, para que se despierten en la sociedad las fuerzas espirituales necesarias y se desarrollen los valores sociales (385).

La dignidad humana.
Nuestra misión para que nuestros pueblos tengan vida, manifiesta nuestra convicción de que en Dios vivo revelado en Jesús se encuentra el sentido, la fecundidad y la dignidad de la vida humana. Urge promover en nuestros pueblos la vida plena que Jesús nos trae para que cada persona viva con la dignidad que Dios le ha dado (389). La fidelidad al Evangelio nos exige proclamar en todos los areópagos la verdad sobre el ser humano y la dignidad de toda persona (390).

viernes, 21 de septiembre de 2012


II Encuentro Nacional de Catequistas 2012.

             Tema 1. Comprometidos en la vida y en la transformación de la sociedad 




             Objetivo:
            Tomar conciencia que como catequistas soy miembro y participe de la sociedad de este tiempo para asumir el compromiso de transformarla a la  luz de la palabra de Dios.
           
             Mira tu realidad
              Responde de manera personal las siguientespreguntas:
  1. ¿Qué idea tienes de sociedad?
  2. En el ambiente social donde te desenvuelves, ¿qué situaciones observas en los siguientes aspectos: situación económica, política, cultural, ecológica y de grupos sociales?
  3. En pequeños grupos coméntalas con tus compañeros
Economía
Pobreza
Desigualdad
Desempleo
Subempleo
Reforma económica insuficiente
Política
Corrupción
Impunidad
Inseguridad ciudadana
Procuración de justicia deficiente
Sistema penitenciario injusto
Violación de derechos humanos
Cultura
Educación deficiente
Influencia negativa en los medios de com.
Social
Pluralidad religiosa
     Ecología
Problemas de tendencia en la tierra
Desperdicio y contaminación del agua
Generación de basura
Contaminación del aire
Deforestación
       Grupos
  sociales
Explotación y maltrato
Adicciones en adolescentes
Falta de atención en los ancianos
Desintegración familiar


Violencia hacia las mujeres
Injusticia laborar hacia los obreros
Injusticia laborar hacia los campesinos
Explotación hacia los migrantes
Discriminación hacia las etnias


Ilumina tu realidad
Confronta tus observaciones en relación con los siguientes documentos del Magisterio (si el tiempo no es suficiente, elige sólo un documento de los dos que se te proponen). Conviene dar espacio para leer los documentos, es muy importante.

De la Exhortación Apostólica Que en cristo nuestra paz, México tenga vida digna lee y reflexiona los siguientes apartados:
        La actividad económica (nn. 28-40)
        En la vida política (nn.41- 58)
        En la vida social (nn. 59-80)
        En la cultura (nn. 81-97)

En la actividad económica
La desigualdad y la exclusión social, la pobreza, el desempleo, los bajos salarios, la discriminación, la migración forzada y los niveles inhumanos de vida, exponen a la violencia a muchas personas (28).

Pobreza y desigualdad
La necesidad y la ambición exponen de igual manera a pobres y ricos a buscar ganancias sin importar su procedencia, ni los riesgos y costos humanos que implican. La desigualdad provoca una honda insatisfacción y sensación de injusticia, que es la puerta de entrada de la violencia y por consiguiente, de un clima de inseguridad (34).

Insuficiencia de las reformas económicas
Desempleo y subempleo
La precariedad del trabajo y el subempleo también están entre los factores que explican la violencia urbana (39).

En la vida política
 Hay descontento social por los errores en la gestión de las políticas públicas para la superación de la pobreza (44).

Corrupción e impunidad
 Hay disimulo y tolerancia con el delito por parte de algunas autoridades responsables de la procuración, impartición y ejecución de la justicia. Esto tiene como efecto la impunidad, las deficiencias en la administración de justicia-por incapacidad, irresponsabilidad o corrupción-. Se ha hecho evidente la infiltración de la delincuencia organizada en instituciones del Estado. Si no hay justicia, se puede delinquir con mayor facilidad (45). La seguridad de los ciudadanos es tarea del Estado (48).

Inseguridad ciudadana
Las prácticas despóticas y autoritarias para combatir el crimen no se justifican en un Estado democrático, provocan miedo y desconfianza y con ello debilitan el tejido social, cerrando así el círculo vicioso de la inseguridad (49).

Procuración de justicia
Es necesario que los funcionarios del sistema de Procuración de Justicia sean gente que no tengan trayectoria de impunidad y que se mantenga el principio jurídico de que:     se es inocente hasta que se demuestre lo contrario (51).

Sistema penitenciario
 Enfrentamos la crisis del sistema penitenciario que no re-socializa ni readapta a los internos y en muchos casos promueve la organización criminal (53).

Violencia institucionalizada
 En un Estado democrático y de derecho como pretende ser el nuestro, las demandas sociales y civiles deben ser atendidas y respondidas (54). No se debe criminalizar la protesta social y quienes recurren a ella para expresar legítimamente sus inconformidades tienen la responsabilidad social de respetar los derechos de terceros (55).

Las fuerzas de seguridad
Como todas las instituciones del Estado, las Fuerzas Armadas tienen la obligación de respetar los derechos humanos y las garantías constitucionales de los mexicanos (57). El perfil de los miembros de los cuerpos policíacos no se puede improvisar, lo mismo que la formación para las tareas que se les encomiendan; en ella no debe faltar un alto sentido de respeto a la ciudadanía y el conocimiento práctico de los derechos humanos (58).

En la vida social
 La seguridad de las personas también corresponde a la sociedad. El principal responsable es el Estado; sin embargo, esto no exime a la sociedad de su responsabilidad, que debe ser asumida de manera proporcional, cada quien de acuerdo a su situación, a su posición y a sus capacidades. La ciudadanía, titular de derechos, cuyo respeto se exige, lo es también de obligaciones que debe asumir (60).

Violencia intrafamiliar
Las relaciones familiares también explican la predisposición a una personalidad violenta. La violencia intrafamiliar es escuela de resentimiento y odio en las relaciones humanas básicas (67).

Violencia contra las mujeres
 La violencia contra las mujeres representa un desafío social y cultural. Esta conducta es aprendida y tolerada socialmente (69). Llama la atención que frente a la violencia que sufren  las mujeres hay quienes las señalan a ellas mismas como responsables de las agresiones que sufren (70).

Violencia infantil
El niño que es maltratado sufre una pérdida notable de su autoestima y se refugia en sus fantasías, muchas de ellas violentas, con probabilidad de que las materialice en la adolescencia o en la vida adulta (72).

La violencia, los jóvenes y los adolescentes
Los adolescentes y jóvenes son una gran riqueza para la sociedad y, sin embargo, viven situaciones familiares y sociales que los convierten en víctimas y actores de hechos violentos. Los adultos tenemos una gran responsabilidad, pues les estamos heredando un mundo violento que los excluye de las posibilidades de una vida digna y los expone  a la muerte (73).

Violencia y vida comunitaria
La vida comunitaria es la primera víctima de la violencia. Se establece un círculo vicioso: la violencia acaba con la vida comunitaria y cuando esto sucede, se propicia la violencia (76).

En la cultura
El comportamiento  violento no es innato, se adquiere, se aprende y se desarrolla; en ello influye el contexto cultural en que crecen las personas. La crisis de valores éticos, el predominio del hedonismo, del individualismo y competencia, la pérdida de respeto de los símbolos de autoridad, la desvalorización de las instituciones –educativas, religiosas, políticas, judiciales y policiales-, los fanatismos, las actitudes discriminatorias y machistas, son factores que contribuyen a la adquisición de actitudes y comportamientos violentos (83).

Emergencia educativa
 La educación programada y propuesta en función del mercado no despliega los mejores valores de los jóvenes y los niños; no les enseña caminos para superar la violencia, ni para llevar una vida sobria y adquirir actitudes, virtudes y costumbres, que darían estabilidad a su futuro hogar, convirtiéndolos en constructores solidarios de paz y del futuro de la sociedad (87).

Medios de comunicación social
 Los medios de comunicación no ayudan a la construcción de la paz cuando informan, sin tener el más mínimo pudor o respeto para su auditorio, para las victimas o para sus familiares y sin medir el impacto social o comunitario (88).

Del Documento Conclusivo de Aparecida lee y reflexiona los siguientes apartados:
        La realidad que interpela a los discípulos misioneros (nn. 33-42)
        Situación sociocultural (nn. 43-59)
        Situación económica (nn. 60- 73)
        Dimensión sociopolítica (nn. 74- 82)
        Biodiversidad, ecología, Amazonía y Antártida (nn 83- 87)
        Presencia de los pueblos indígenas y afroamericanos en la Iglesia (nn. 88-100)

De lo que reflexionamos en el primer momento ¿Qué puedes comentar a partir de los documentos?

Transforma tu realidad

A partir de lo reflexionado en los documentos arriba referidos, pregúntate:

1.- ¿Qué papel asumes en la transformación de tu sociedad?
2.- ¿Qué acciones puedes emprender en cada uno de los aspectos señalados para lograr tu transformación?
3.- Algunas acciones que señala el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia(540- 574) son:

A)   Anunciar el Evangelio con el testimonio de una vida ejemplar, en la familia, en el ámbito del trabajo, de la cultura y la ciencia y de la investigación; en el ejercicio de las responsabilidades sociales, económicas y políticas.
B)   Gestionar los asuntos temporales ordenándolos según Dios.
C)   Valorar la oración, la reflexión y el diálogo para comprender las realidades sociales y mejorarlas.
D)   La conversión de corazón para comprometerse a sanar las instituciones, las estructuras y las condiciones de vida contrarias a la dignidad human.
E)    Afirma el inviolable derecho a la vida desde la concepción  hasta la muerte.
F)    Reconocer  el derecho a la libertad de conciencia y a la libertad religiosa.
G)   Defender el matrimonio y la familia.
H)   Presentar en términos culturales actualizados el patrimonio de la tradición católica,  sus valores, sus contenidos, toda la herencia espiritual, intelectual y moral.
I)     Considerar a los MCS como posibles instrumentos de solidaridad
J)    Participar en la política, en la búsqueda del bien común con espíritu de servicio; el desarrollo de la justicia con atención particular a las situaciones de pobreza y sufrimiento; el  respeto de la autonomía de las realidades terrenales, el principio de subsidiaria, la promoción del diálogo y de la paz.
k)    Distinguir y conectar el orden moral y el orden social.
L)    Ser fieles a la propia identidad y dispensables al diálogo con todos.
M)  Discernir  lo concerniente a la elección de los instrumentos políticos o la adhesión a un partido y a las demás expresiones de la participación política.
N)   Distinguir entre instancias de la fe y opciones sociopolíticas,  opciones particulares de los cristianos y las realizadas por la comunidad cristiana.
¿Cuál de estas acciones estás llevando a cabo y cuál te hace falta impulsar?, sus contenidos, toda la herencia espiritual, intelectual y moral.